A casi una semana de su estreno en la plataforma de Netflix, Pinocchio de Guillermo del Toro junto a Mark Gustafson, ha arrasado con una gran cantidad de buenas críticas, incluyendo al aclamado Stephen King.
Es la adaptación del cuento clásico escrito por Carlo Collodi a una animación Stop Motion acompañada de música, pero en esta ocasión quitando la censura del cuento, tocando temas sensibles como la guerra, religión, el duelo, la explotación laboral, entre otros.
"Cada vez que la escribía, lloraba. Cuando llegué al final, estaba hecho un baño de lágrimas, porque es así personal”.
Explicó durante la Feria del Libro de Guadalajara, donde relató también que la película muestra parte de su filosofía, reflejando su manera de ver la vida.
Tiempos de producción
El Stop Motion es la técnica que consiste en crear personajes a los cuales se les toma 24 fotografías en diversas posiciones, para simular movimiento por un segundo.
Tardaron 15 años en hacer Pinocchio, donde la preparación de la marioneta tardó hasta un año para poder tenerla terminada, una sola toma donde Spazzatura regresa al carnaval y se sostiene de un clave, les tomó poco más de 90 días.
Parte de la duración de la película, se atribuyó a que fue complicado encontrar fuentes de financiamiento.
"La animación es un medio, no un genero"
“Taller del Chucho”
Ubicado en Guadalajara, Jalisco, este proyecto impulsado por Del Toro, es un estudio de animación que impulsa el talento local propiciando un espacio para la producción, innovación, difusión y promoción de la industria del cine, donde se grabaron seis minutos de la película, tratándose de la escena en la que se visita “al más allá”