La tolerancia es respeto, aceptación y aprecio de la extra que caracteriza a las culturas de nuestro mundo, nuestras formas de expresión y maneras de ser humanos.
La injusticia, la violencia, la discriminación y la marginación son formas comunes de intolerancia. La declaración describe la tolerancia como un requerimiento político y legal para los individuos, los grupos y los estados.
Se sitúa dentro del marco del derecho internacional sobre los derechos humanos elaborado en los últimos cincuenta años la cual pide a los Estados legislar para proteger la igualdad de oportunidades de todos los grupos e individuos de la sociedad.
¿QUÉ ES UNA CONDUCTA INTOLERANTE?
Se podría considerar intolerancia a tener una actitud cerrada e inflexible a lo que es diferente, como al no respetar y aceptar diferencias políticas, sexuales, raciales, sociales y demás.
¿CÓMO PRACTICAR LA TOLERANCIA?
Si bien, la mejor manera de fomentar la tolerancia es mediante la educación, también es necesario llevarlo a la práctica en nuestro día a día.
La base podríamos conjeturar que es el respeto mutuo entre todas las personas que conformamos la sociedad. Esto conlleva a tener una actitud de cooperación, si bien tenemos ideologías distintas a otros, no por ello se tomarán acciones de discriminación o faltas de respeto solo por pensar, vivir o accionar de una manera diferente.
Es indispensable la unión entre la sociedad para luchar contra la intolerancia y al igual es necesaria la cooperación de todos los órdenes de gobierno para impulsar y promover leyes sobre educación y derechos humanos que prohíban la discriminación contra las minorías.