Alimentos afrodisíacos ¿en verdad funcionan?

Conoce el mito detrás de éstos y experimenta algunos

María O. Ruiz | La Voz de la Frontera

  · viernes 30 de septiembre de 2022

Foto: Imagen ilustrativa | Pexels

El consumo de alimentos como afrodisíacos para aumentar el apetito sexual, es una idea antigua que va desde los egipcios hasta los hindúes, pasando por los griegos, y que incluso se menciona en el Antiguo Testamento. Los más populares que se conocen para estimular el apetito sexual son los mariscos, el chocolate, la miel y algunos frutos.

La palabra afrodisíaca viene de la diosa griega de la belleza, sensualidad y el amor, Afrodita.

El sexoterapeuta, Alfredo Loreto Barrios, comenta que principalmente se tiene la idea que la cualidad de estos alimentos implica desarrollar un mayor deseo, desempeño y vigorosidad sexual mayor. Estas características pueden llegar a ser confundidas con el deseo sexual.

FASES DEL DESEO SEXUAL

Cuando se habla de deseo sexual, es importante mencionar las cinco fases de la respuesta sexual: Estímulo, excitación, meseta, orgasmo, fase de resolución.

En la primera fase del estímulo sexual debe de haber un estímulo sexual efectivo, psicológico y físico, en esta última es importante mencionar que los estímulos pueden ser captados a través de nuestros sentidos, cosas que miremos, escuchamos, olemos o tocamos. Mientras que el psicológico tiene que ver con recuerdos y fantasías.

En la primera y segunda fase es donde entran los afrodisíacos, estos funcionan como una estimulación que ocasiona una respuesta sexual. Los afrodisíacos son solo la idea que genera un deseo y desempeño sexual.

“Cuando comentan de los mariscos [...], es un mito realmente, no es que sean afrodisíacos, sino que es como una inyección de testosterona para que aumente el deseo sexual inmediato. No es así realmente, más bien tiene que ver con una idea y al tener esa idea da más seguridad a la persona “

ESTÍMULO MENTAL

El alcohol es un desinhibidor del sistema nervioso central; las personas se vuelven más extrovertidas, provocando que se facilite el interactuar con otras personas. Si se toma en ciertas condiciones y cierta cantidad se puede ser activo sexualmente. Si se pasa de cierta cantidad de alcohol puede bajar el sistema sanguíneo, impidiendo erecciones.