Su genética es privilegiada y aunque el fisicoculturismo no fue su primera opción, hoy caminan y presumen unas siluetas imponentes rumbo al torneo más importante a nivel estatal y, después, a nivel nacional.
Marco Ramírez, campeón absoluto de Men´s Physique; Diana González, campeona absoluta de Woman´s Physique y Oliver Nevares, campeón absoluto de Máster Classic Physique, todos en la pasada edición del torneo Mr. Mexicali 2021, ahora se alistan para nuevos retos.
Estos cuerpos que parecen sacados de cómics de acción, no se construyeron solos. Hace falta tener disciplina, sacrificar muchas cosas y, por supuesto, pasar hambre.
Para llegar en forma a estas competencias, los deportistas se someten a estrictas rutinas de ejercicio, rigurosas dietas, tienen que dejar el sodio en su totalidad, lo que implica tomar agua destilada y prepararse para cambios emocionales.
“Es muy pesado, es mi primer año que incursiono en este deporte, es un proceso muy demandante”, dijo Marco Ramírez, quien antes de hacer culturismo se ejercitaba con el crossfit y dos lesiones en sus rodillas lo llevaron al gimnasio.
“No cualquiera hace este proceso al 100% y lo notas en el escenario”, añadió, “sigo preparándome para nuevos retos, hemos ajustado, la carga cambia un poquito”.
Un estilo de vida
Diana González entró al mundo del culturismo y el fitness casi por accidente. A una invitación para cubrir una clase, poco a poco se interesó en entrenar y participar.
“Paulatinamente he podido avanzar, en diferentes categorías, ya gané el Mr. Baja y pude llegar al Mr. México el año pasado y calificar a las finales, espero este año poderme traer eso, es una de mis metas en este deporte”, dijo.
En este 2021 va por su tercera participación en el Mr. México, el año pasado, tras sortear la pandemia, logró entrar a la final y este año su objetivo es más alto.
“La pandemia nos afectó, me sentí castigada, no nada más yo, todos. Tratamos de seguir entrenando, en la casa, en donde se podía y es que para los que nos dedicamos a esto es un estilo de vida”.
Dispuestos a todo
El entrenamiento es diario y alterna diferentes partes del cuerpo para llegar a construir un físico que lo ha llevado a aprender más cosas. Oliver Nevares compite desde 2019 y se ha topado con un deporte en el que no todo es sudor.
“Es un deporte muy demandante y más para una persona como yo que ya tengo 49 años, es bastante difícil hacer la dieta, la deshidratación, el tiempo en el gimnasio”, dijo.
Si el cuerpo de una persona joven suele ser lento en su recuperación, en edades adultas el proceso lo es aún más. Es por eso que Oliver ha tenido que adaptarse a diferentes cambios.
“He aprendido a tomar las cosas con disciplina y calma, a apegarme a las instrucciones y aprender a obedecer”, añadió. “Es un deporte que no es barato, hay que tener la capacidad y el tiempo, la ayuda de tu familia porque también experimentas cambios emocionales muy grandes”.