Disciplina y esfuerzo definen al joven clavadista, Alan Velázquez, quien además de ser uno de los representantes de Baja California en los Juegos Nacionales CONADE 2022, se dedica a trabajar como payaso en eventos junto a su papá.
Con tan solo 10 años de edad, Alan se ha robado los corazones de sus compañeros y sus entrenadores, pues además de tener una gran capacidad para practicar clavados, su carisma y su mentalidad lo convierten en una pieza única en su equipo, que compiten en Baja California Sur.
El joven tijuanense cumplirá apenas un año practicando clavados, por lo que le resta un largo camino en este deporte, donde luce como una de las promesas de Baja California en la disciplina.
“Me gusta mucho estar en el agua, por eso decidí entrar a practicar clavados. Tenía la opción de gimnasia pero mejor me quede aquí porque me divierto mucho”, comentó el joven atleta en una entrevista exclusiva con LA VOZ DE LA FRONTERA.
Velázquez quedó fuera de los puestos de medalla en su participación en los Juegos Nacionales, pero buscará meterse al podio en las competencias del siguiente año, donde se espera que llegue como uno de los favoritos en su categoría.
Desde los 5 años de edad, Alan trabaja como payaso en fiestas infantiles junto a su papá, lo que le ha servido para desarrollar un gran equilibrio y un asombroso sentido del humor.
“A mi me dicen el payaso “Toto”, me gusta mucho hacer reír a la gente disfrazado, hago juegos y malabares para divertirlos, a veces no los hago reír pero no pasa nada”, compartió Alan.
Como “Totó”, trabaja junto a su papá, Jaime Velázquez, quien tiene más de 25 años trabajando como el payaso “Jimmy” en la ciudad de Tijuana.
Jaime, aseguró que noto que su hijo tendría muchas habilidades para hacer lo que quisiera, ya que desde muy pequeño comenzó a intentar hacer malabares, cosa que actualmente domina a la perfección.
“Si pudiera definir a Alan en una sola palabra sería “Enfocado”, ya que la verdad cuando él dice que hará algo siempre lo hace, así tarde muchas semanas o meses, siempre lo consigue”, compartió el papá de Alan.
Actualmente, Alan cursa el 4to. año de primaria y tiene una clara rutina en su semana, ya que de lunes a viernes asiste a la escuela y a sus entrenamientos, pero sábado y domingo son solo para trabajar junto a su padre.
“No podría dejar de ser payaso, me gustaría ser clavadista profesional e ir a juegos olímpicos pero yo les diría que puedo ir a entrenar ciertos días, porque también tengo que trabajar de payaso”, comentó Alan.