La plancha o puente abdominal es un ejercicio isométrico, estático, sin movimiento que involucra muchos músculos del cuerpo, de hecho casi todos con excepción de los antebrazos.

Este ejercicio se ha vuelto popular en las rutinas modernas, porque presenta algunas ventajas. Es fácil de ejecutar y ya que es una simple postura sin movimiento, no demanda coordinación.

Casi cualquiera lo puede ejecutar, incluyendo personas con problemas diferentes de columna o cintura. Ya que su ejecución es por tiempo, se adapta fácilmente a la resistencia y fuerza de cada individuo.

Podrán sostenerlo 10, 15, 20, 30 o más segundos cada individuo, aplicado en 2, 3, 4 o más lapsos separados. El objetivo es sostener la postura y estar muy consciente de los músculos que estás tensando.

Es fácil de combinar con otros ejercicios pudiendo pasar de la plancha a otro sin descanso intermedio o de otro a la plancha para hacer rutinas más dinámicas.

Esto de emparejar dos ejercicios se denomina “súper serie”. Y sirve para subir la intensidad de la rutina. La ventaja de la plancha es de ser estática y poder ejecutarse prácticamente en donde sea.

Podemos hacer sentadillas y después la plancha o lagartijas y después la plancha o abdominales y después la plancha o lo anterior pero al revés. Me gusta el rescate que se hizo hace algunos años para este ejercicio empolvado y me incluyo entre los entrenadores que lo habíamos olvidado.

Te dejo esto a ti que te gusta el ejercicio y comparto algunas imágenes que te pueden servir. Ponlo a prueba y te darás cuenta qué tan práctico y favorable para tu acondicionamiento es usar esta antigua pero efectiva plancha, a la que también se puede llamar puente abdominal.

Saludos.

Armando Sánchez Díaz Medina

Guía nutricional y acondicionamiento

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