Cumpliendo con los sacramentos de Dios nuestro Señor, los hermanos Lenin y Marlenne Alvarado Carpio visitaron llenos de júbilo el templo de Nuestra Señora del Carmen, para recibir el Cuerpo y la Sangre de Cristo, llevando así a cabo su primera comunión.
Portando elegantes y bellos atuendos, los hermanos ingresaron al templo acompañados por sus felices padres Lenin Alvarado y Claudia Carpio, quienes con anticipación se dieron a la tarea de llevar a sus hijos al catecismo.
Durante la ceremonia religiosa el párroco oficiante hizo hincapié en la importancia de recibir este sacramento, ya que a través de la hostia todo ser humano recibe a Cristo y de esta forma se hace más partícipe durante la misa.
Así pues, Leticia Alvarado y Armando Carpio fungieron como padrinos de los recién comulgantes y se comprometieron con el Señor para cuidarlos y brindarles siempre el buen ejemplo y guiándoles por el mejor camino.