La amistad ha sido el motivante perfecto para este grupo de estudiantes de la licenciatura en Medios Audiovisuales de la UABC, formando un grupo de 10 compañeros cuyo entusiasmo por el cine los ha llevado a trabajar juntos en el cortometraje “Díaz de paz”.
En este proyecto participan: Salvador Romero, director; Orlando Vizcarra Ramírez, asistente de director; Norma Valeria Alvarado, productora; Ana Texcahua, asistente de producción; Karen López, directora de fotografía; Samuel Hernández, sonidista; Gabriel Adame, diseño sonoro; Bruno Rubén Lozada, editor; Isabel Flores, directora de arte y Melany Aidé Rodríguez, vestuario.
El guión, creado por Salvador, fue el único del Norte de México elegido para participar en el décimo tercer Rally Universitario que se organiza para la edición 25 del Guanajuato International Film Festival (GIFF), una competencia que brinda talleres y da seguimiento al proceso creativo para concluir con una filmación y post producción de 48 horas.
“Es un guión sobre un detective que está buscando a un asesino serial y nace de ver cómo la violencia y cómo la gente no se preocupa por solucionar esos problemas o lo ignora y es una reflexión ante esa situación”, comentó el cineasta.
“La UABC ya ha participado anteriormente en este concurso, entonces dan una plática invitando a los alumnos a participar, ya que tuvimos experiencia de primera mano de tener a nuestros amigos participando, nos dieron ganas de participar”, comentó Orlando.
“Tenemos que hacer el cortometraje en 48 horas, todo desde grabarlo, editarlo y entregarlo en ese lapso de tiempo, grabado en Guanajuato”.
Algunas de las actividades del rally son prácticas y requieren asistir de forma presencial, así que han realizado visitas constantes a Guanajuato. “La organización ha sido extraordinaria en nuestro caso, ya que somos el único equipo que representa al Norte de México… Hemos estado asistiendo parte del equipo y nos hemos ido turnando para asistir”, Sonido, foto, dirección de actores, diseño de producción, maquillaje, efectos especiales y lenguaje visual son algunos de los cursos que han tomado.
Según Valeria, los gastos de sus vuelos han estado siendo solventados gracias al apoyo de la UABC y la generosidad de la gente que los rodea. “Tuvimos nuestra campaña en Kickstarter donde se recaudó la meta afortunadamente, también hemos vendido chocolates, al principio hicimos una rifa, son muchas cosas las que estamos haciendo para recaudar fondos y llegar hasta Julio que es la semana del rally”.
PREPARANDO CADA DETALLE
Por el momento, el grupo se encuentra en la etapa de preproducción, ya han realizado algunas maquetas, que son ensayos para medir sus tiempos, ya que tienen un límite de 6 minutos; todo esto para que alrededor de noviembre, ya pasado el concurso y sin importar el resultado, su cortometraje sea proyectado en una sala de cine de Mexicali.
Estos jóvenes, invitan a no darse por vencidos, sea cual sea la meta a perseguir. “No importa si estás estudiando o no la carrera en la que nosotros estamos, lo importante es querer hacer lo que te apasiona, que es algo muy bonito y a buscar la manera de hacerlo, el cine se puede hacer desde un celular hasta una cámara súper profesional, hay muchas formas de hacerlo y si buscas el apoyo, hay muchas personas alrededor y lo hemos notado gracias a nuestro proyecto, que están muy entusiasmadas por hacer cine, ya sea trabajando o participando, hay muchas personas que están siempre al tanto”. dijo Salvador.
Precisamente, para Isabel Flores, ser parte de este concurso era todo un sueño. “Yo me enteré del GIFF estudiando otra carrera, en otra universidad en otro estado y desde ahí hice mi plan de vida y meta más grande, concursar en el GIFF, pero tenía que ser estudiante y quería estudiar algo que tuviera que ver para no llegar sin nada, pero igual pueden llegar si no son estudiantes de medios o de cine, hay muchos que son de comunicación, derecho, ingeniería…”.
“Siento que gracias a que estamos en la universidad pudimos tener esta oportunidad de participar con otros estudiantes de forma nacional y hemos conocido muchos compañeros que están en lo mismo de diferentes estados y es una experiencia muy interesante gracias a eso, ya que estamos conociendo personas de varios estados que también les gusta hacer cine”, agregó Karen.
Para concluir, Valeria agregó que el aprendizaje no sólo ha sido académico, ya que también han creado nuevos vínculos y reforzado los de su comunidad. “Puedes conocer más diversidad y también es muy padre recibir el apoyo de tu universidad, compañeros y gente que tienes alrededor que te apoya en este camino, porque sí es muy largo pero a la vez es muy bonito”.