Aficionados del anime, manga, cultura japonesa y entretenimiento pop en general fueron parte de algunos de muchos eventos locales enfocados en ser un espacio para los fanáticos cachanillas.

Uno de ellos se llevó a cabo en la Asociación Mexicano-Japonesa de Mexicali, dirigida por Anna Kimura, en el que los asistentes participaron en talleres de alimentos típicos como el onigiri, dibujo y torneos de videojuegos.

Por otro lado, en las instalaciones de la Universidad Xochicalco se celebró la primera edición del Bazar Otaku, que contó con amenización de la banda Phantastic, además de realizar pasarela cosplay y rifas.

La palabra “otaku” originalmente tenía connotaciones negativas y en Japón se utilizaba para describir a cualquier persona obsesionada con algo, pero en la actualidad se ha adaptado el término para simplemente hacer referencia al consumo o gusto por el entretenimiento y cultura nipona.