Mañana es el día, mañana se despejan las dudas en la elección presidencial en Estados Unidos entre la vicepresidenta demócrata, KAMALA HARRIS y el ex presidente republicano, DONALD TRUMP, que en realidad son dos sopas del mismo chocolate, aunque uno puede sonar más radical con la otra. ¿Y a nosotros qué nos importa? Pues bueno, nos importa mucho, ya que México comparte más de 3 mil kilómetros de frontera con Estados Unidos, y nada más es nuestro principal socio comercial. Así es que la elección es crucial en la relación entre México y Estados Unidos por lo menos durante los próximos 2 años, que corresponden a 2 terceras partes de la gestión de la morenista, CLAUDIA SHEINBAUM PARDO. Hay que recordar que en 2016, todo mundo consideraba al republicano como un loco, y que jamás ganaría la presidencia de la República, sobre todo después de una gestión como la del demócrata, muy querido y carismático BARAK OBAMA. Pues en esa ocasión ganó, y lo hizo, ya que no todo Estados Unidos es California ni Nueva York, también existe Texas y una gran parte central del país que es eminentemente rural y le creyó a TRUMP, como muchos le siguen creyendo, sobre todo, muchos estadounidenses vieron como cuando mantuvo a raya al gobierno de ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, que convirtió al país en el patio trasero de Estados Unidos, y le hizo el trabajo sucio con la Guardia Nacional al Sur del país, que la puso a hacer la labor de la Border Patrol. Es entonces que en el gobierno del demócrata JOE BIDEN, que lo han visto más bien débil, y como el gobierno mexicano se le montó a tal grado, de relegar al embajador de Estados Unidos, KEN SALAZAR como un mero empleado extranjero, al que en la presente administración de SHEINBAUM PARDO, le han retirado el derecho de picaporte a la oficina de presidencia en Palacio Nacional, mientras que en la pasada administración fue desairado una y otra vez por el ex presidente LÓPEZ OBRADOR. Todo esto lo ve el votante estadounidense, que, si bien México no está fijo en su mente de manera permanente, sí ha visto como un promedio de 100 mil estadounidenses fallecen en sus calles por sobredosis de fentanilo, mucha de esta proveniente de México. Aunque dicen que a México le conviene que gane Kamala Harris debido a que es mujer, y que se llevará muy bien con la presidente SHEINBAUM, hay que recordar que a pesar de todo, LÓPEZ OBRADOR se llevó muy buen con TRUMP, es más, hasta fue a visitarlo a la Casa Blanca. Y sobre las políticas racistas y anti inmigrante del republicano, tan solo hay que recordar que OBAMA es el presidente que más deportaciones de mexicanos ha realizado, y eso que en México lo queríamos mucho.
TRÁMITE
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), decidirá hoy si invalida o no parcialmente la reforma judicial presentada por la aplanadora llamada Cuarta Transformación. Aunque sabemos que sea cual fuere el resultado, el Ejecutivo nacional no acatará el fallo de la corte. Mañana, trabajadores del Poder Judicial de la Federación saldrán a la calle para reanudar sus manifestaciones, en este caso, van a presenciar la sesión de la corte, por lo que podrían reanudar sus marchas. Así es que este 5 de noviembre, se juega el futuro del país, aunque todo parece indicar que su suerte, está decidida.
FRENO
La reciente iniciativa que se presentó en Congreso para limitar el gandallismo, es tan solo una pequeña parte de lo mucho que se puede hacer para evitar que sigan invandiendo terrenos y viviendas en Mexicali, así que esperemos que los diputados se pongan las pilas y aprueben esta iniciativa que busca que una persona no pueda prescribir más de una propiedad. En este momento no vamos a hablar de la necesidad que tienen los más vulnerables por alcanzar un lugar para vivir, eso corresponde a un quehacer que también debe atender gobierno. Aquí nos centraremos a aquellos abogansters que han tomado como una forma de vida estar buscando cuando terreno o casa abandonada se encuentren y proceder por medio de un juicio a quedárselo de mala fe. El tema de las invasiones parece por fin alguien se atreve a visualizar, y es que este tema va más allá de sacar partida económica o tener un espacio para “vivir”, ya que muchas de estas invasiones terminan por perjudicar a la misma sociedad, para muestra las muchos drenes, canales o zona de torres federales que pudieran ser un área verde o en su caso una vialidad, pero al invadirse terminan por sentenciar el buen desarrollo de la ciudad.