/ miércoles 9 de octubre de 2024

Les pedimos perdón

Cuauhtémoc López Guzmán

Esa fue la solicitud que hizo Andrés Manuel López Obrador al gobierno español para que en un acto de contrición política, España se disculpara de la colonización de estas tierras que en esa época no se llamaban México.

Esta solicitud me parece una aberración personal de AMLO y la actual presidenta la mantiene; quizás la lleve a un desencuentro diplomático con el gobierno español, sólo por obedecer y quedar bien con quien le regaló el cargo de presidenta.

Foto: Imágen Ilustrativa / Freepik

México no existía cuando llegaron los españoles. En toda Mesoamérica habitaban distintos pueblos nativos, en particular en lo que hoy es el centro, sur y sureste de México vivían olmecas, mayas, aztecas, zapotecas, toltecas, tarascos, otomíes, huicholes, coras, huastecos, entre otros.

Si bien es cierto que la Conquista fue eso, colonización, adoctrinamiento religioso (evangelización) y explotación, no podemos exigirles a los ciudadanos españoles actuales que nos pidan perdón por lo que hicieron sus paisanos hace 300 ó 400 años. En primer lugar porque la dominación y explotación no la realizaron contra mexicanos (no exista México); en segundo lugar, los que hoy nacimos y vivimos en México somos mestizos, producto de la unión de indígenas y españoles, todos nuestros apellidos proceden de España.

En tercer lugar, hace 450 años los españoles invasores no sabían ni existía la definición de derechos humanos, igualdad, soberanía, autodeterminación de los pueblos, respeto a la ley (ellos las hicieron) para gobernar y someter claro a los indígenas. En cuarto lugar, si algo bueno resultó de la Conquista fue en el nacimiento de una nación hoy llamada México. Quizás si nunca hubieran arribado los españoles, esta nación (México) no existiría, este país estaría dividido en distintas naciones indígenas, es decir, habría un país zapoteca, azteca, tolteca, cora, otomí, maya, en disputas territoriales y guerras religiosas (al estilo Medio Oriente). En quinto lugar, la solicitud de perdón me parece aberrante porque es como si una madre le pide al padre que le pida perdón a su hijo (mutuo) por haberlo engendrado; es de suponer que ese hijo desprecia el acto de concepción por el que está vivo.

Sexto lugar: En la historia patria y en la cultura popular se enaltece nuestro pasado indígena, se dice debemos estar orgullosos de esos grupos indígenas. Sin embargo, existe una doble moral, pues decirle a alguien indio es una gran ofensa; queremos ser blancos, de ojos azules o verdes; que nuestros hijos no sean morenos o prietos, pues todo rasgo indígena se desprecia. El color de la piel determina en parte cómo te ven y te tratan, somos un pueblo mestizo racista. Perdón por decirlo.

Mail to: cspoldoc@hotmail.com

Cuauhtémoc López Guzmán

Esa fue la solicitud que hizo Andrés Manuel López Obrador al gobierno español para que en un acto de contrición política, España se disculpara de la colonización de estas tierras que en esa época no se llamaban México.

Esta solicitud me parece una aberración personal de AMLO y la actual presidenta la mantiene; quizás la lleve a un desencuentro diplomático con el gobierno español, sólo por obedecer y quedar bien con quien le regaló el cargo de presidenta.

Foto: Imágen Ilustrativa / Freepik

México no existía cuando llegaron los españoles. En toda Mesoamérica habitaban distintos pueblos nativos, en particular en lo que hoy es el centro, sur y sureste de México vivían olmecas, mayas, aztecas, zapotecas, toltecas, tarascos, otomíes, huicholes, coras, huastecos, entre otros.

Si bien es cierto que la Conquista fue eso, colonización, adoctrinamiento religioso (evangelización) y explotación, no podemos exigirles a los ciudadanos españoles actuales que nos pidan perdón por lo que hicieron sus paisanos hace 300 ó 400 años. En primer lugar porque la dominación y explotación no la realizaron contra mexicanos (no exista México); en segundo lugar, los que hoy nacimos y vivimos en México somos mestizos, producto de la unión de indígenas y españoles, todos nuestros apellidos proceden de España.

En tercer lugar, hace 450 años los españoles invasores no sabían ni existía la definición de derechos humanos, igualdad, soberanía, autodeterminación de los pueblos, respeto a la ley (ellos las hicieron) para gobernar y someter claro a los indígenas. En cuarto lugar, si algo bueno resultó de la Conquista fue en el nacimiento de una nación hoy llamada México. Quizás si nunca hubieran arribado los españoles, esta nación (México) no existiría, este país estaría dividido en distintas naciones indígenas, es decir, habría un país zapoteca, azteca, tolteca, cora, otomí, maya, en disputas territoriales y guerras religiosas (al estilo Medio Oriente). En quinto lugar, la solicitud de perdón me parece aberrante porque es como si una madre le pide al padre que le pida perdón a su hijo (mutuo) por haberlo engendrado; es de suponer que ese hijo desprecia el acto de concepción por el que está vivo.

Sexto lugar: En la historia patria y en la cultura popular se enaltece nuestro pasado indígena, se dice debemos estar orgullosos de esos grupos indígenas. Sin embargo, existe una doble moral, pues decirle a alguien indio es una gran ofensa; queremos ser blancos, de ojos azules o verdes; que nuestros hijos no sean morenos o prietos, pues todo rasgo indígena se desprecia. El color de la piel determina en parte cómo te ven y te tratan, somos un pueblo mestizo racista. Perdón por decirlo.

Mail to: cspoldoc@hotmail.com

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