CONTRASENTIDO
En México vivimos un crudo invierno y nos depara un extenuante verano. Así que la primavera es una época de transición, un descanso y un espacio propicio para florecer planes e ideas.
En días anteriores iniciamos este ciclo con grandes noticias, como la inauguración de obras estructurales y de otros temas políticos que pueden propiciar un despegue de nuestra economía para aliviar la resaca de la pandemia. En las primeras semanas de abril viviremos un ejercicio democrático sin precedentes en la historia de nuestro país. La revocación de mandato es una consulta popular para decidir si el actual Presidente prosigue con su mandato o lo concluye anticipadamente.
Más allá de los costos económicos de la consulta y de las trabas legales que ha puesto el árbitro de la contienda, el hecho de que se le pregunte al pueblo es un gran avance. Por todo ello, es súper importante que tomemos la responsabilidad cívica y política de participar para decidir el futuro de México.
A pesar de la guerra entre Rusia y Ucrania, nuestra economía sigue con signos de estabilidad, pero la turbulencia financiera es una gran amenaza. Los apoyos y subsidios a la gasolina hacen que nuestra inflación se contenga y no se dispare. Así que mientras los precios internacionales del petróleo sigan a la alza, se tendrán recursos adicionales para torear los efectos internacionales.
La situación pudiera cambiar a nuestro favor cuando la nueva refinería se termine y entre en operaciones, por lo que tendríamos mayores posibilidades de vender petróleo y de no importar las gasolinas. Así que esta primavera también es una esperanza en ese sentido.
En el mismo tema económico se anunció un aumento a la tasa de interés por parte del Banco de México, lo que significa que es un esfuerzo para contener la inflación al retirar excesos de circulante en nuestra economía, pero también significa que los préstamos para la inversión subirán y pudieran afectar proyectos de inversión necesarios para lograr un tasa de crecimiento necesaria que genere los empleos que son requeridos por la ciudadanía.
Los vaivenes seguirán sin duda alguna, pero debemos agradecer este pequeño respiro que representa la primavera para renacer y lograr nuestros objetivos personales y como país. La mejor forma de afrontar los retos es preparándose y llenándose de energía para lo que se nos presente. Esperemos que esta primavera sea magnífica para todos.