MANUEL GÓMEZ MORÍN, nieto del fundador del PAN, de quien resulta su homónimo, anduvo de gira por Tijuana dando a conocer el movimiento “O dejan al PAN… o nos vamos”. Destacó la necesidad de que se corrija y limpie el padrón de militantes panistas para que se abra a la participación a la sociedad, de sangre nueva para consolidar un PAN recargado, ya que el actual no le sirve de nada a México. Vaticinó que entre 30 mil y 40 mil militantes del PAN pueden abandonar sus filas, de los poco menos de 300 mil que integran el padrón total, con lo cual Acción Nacional estaría en riesgo de perder su registro debido a la inconformidad en contra de quienes lo tienen “secuestrado”, como son el actual dirigente nacional y senador de la República, MARKO CORTÉS, su delfín que busca que los releve en la dirigencia nacional, JORGE ROMERO y el eterno aspirante a la Presidencia de la República, SANTIAGO CREEL MIRANDA, a los que se sumó el ex candidato presidencial y actual senador RICARDO ANAYA, que lo manejan a su conveniencia personal. GÓMEZ MORÍN, consejero nacional del PAN, exigió la suspensión del proceso de elección del próximo Comité Ejecutivo Nacional (CEN), de ese partido para que se designe un comité transitorio que convoque a un nuevo periodo de elecciones abierto a las bases.
En conferencia de prensa, como parte del recorrido que realiza por todo el país, se descartó como candidato a la presidencia del CEN panista, pues ahora es tiempo de mujeres y sería conveniente que algunas de sus militantes distinguidas aspiren a ese cargo. Mencionó a CARMEN SEGURA RANGEL y a la ensenadense ELOÍSA TALAVERA como prospectos para encabezar una presidencia interina, aunque se pueden revisar otros nombres. Aclaró que el movimiento “O dejan al PAN... O nos Vamos”, que él encabeza con el respaldo de la militancia, no es en apoyo de ADRIANA DÁVILA, quien es candidata a presidir ese partido, al igual que JORGE ROMERO y advirtió que ella debe darse cuenta que participa en una simulación porque “hay una acción afirmativa” que la deja estar presente en la contienda.
Así están las cosas en Acción Nacional. El próximo 10 de noviembre votarán por su dirigencia nacional y la estatal. En Baja California no están tan bien las cosas, porque la lucha entre la ex diputada federal LIZBETH MATA LOZANO y la ex diputada local AMINTHA BRICEÑO CINCO, está de mírame y no me toques y más caliente que un carro en pleno verano mexicalense. Pero una cosa es verdad: A veces es mejor mirar al pasado para ver cómo se hacían las cosas y dejar de lado las imposiciones que sólo buscan crear una falsa sensación de consenso y un ahorro de desgaste, lo que finalmente les ha salido más caro.
EN JUEGO
De acuerdo con el experto en materia electoral, CARLOS BARBOZA CASTILLO, 31 cargos para el Poder Judicial de la Federación estarán en juego en las elecciones del próximo 1 de junio. Precisó que además de estos puestos locales, se sumarán los nueve espacios en la Suprema Corte de Justicia, así como cinco magistraturas del Tribunal de Disciplina Judicial. En lo que se refiere al desglose de lo local, indicó que 14 puestos se refieren a magistraturas de circuito y 17 a juzgadores de distrito. “Es como si fuera un proceso electoral”. El también ex fiscal electoral de Baja California destacó que a nivel nacional serán 881 cargos para los que se competirá en la siguiente jornada electoral, que será la primera de su tipo para el Poder Judicial.
¿LA HEROÍNA?
VICTORIA BENTLEY DUARTE encontró su fuente de “agua bendita” en la reforma del Issstecali. Sí, la ex secretaria sindical, ex secretaria estatal y ex diputada local ha decidido volver al escenario público para salvarlos de ella misma. ¿No es irónico? Porque, estimado lector, déjame refrescarte la memoria: cuando BENTLEY DUARTE formó parte de la XXII Legislatura del estado, fue una de las más fervientes defensoras de esa reforma al Issstecali en el 2015, que según ella iba a ser la salvación de los trabajadores burócratas, pero no lo fue. La verdadera joya aquí es que cuando finalmente se realizó la auditoría a la institución, VICTORIA, en su infinita sabiduría, proclamó que todo estaba en perfecto orden. Claro, porque cuando tienes una institución en la que hay señales de despilfarro y corrupción, lo único que falta es que alguien llegue y diga “tranquilos, todo va bien aquí”. Pero ¿quiénes somos nosotros para cuestionar? El caso es que en medio del desastre financiero actual del Issstecali, BENTLEY DUARTE vuelve dispuesta a salvar a la institución que ayudó a hundir. Está de regreso, con más ímpetu que nunca y dispuesta a salvar a los trabajadores de la burocracia de sus propias decisiones.