Es muy difícil tapar el sol con un dedo, más aún que siendo pro gobierno, se defiendan las causas sociales. Algo así es lo que está pasando con el eterno activista SERGIO TAMAI QUINTERO, así como su hijo, el regidor por Morena, SERGIO TAMAI GARCÍA. Ambos son fieles seguidores del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y le han comprado el discurso ese de “primero los pobres”. Ayer, los activistas acudieron a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en la que fueron acompañados por decenas de personas, la mayoría de ellas de la tercera edad, a quienes le llegaron recibos de consumo de hasta más de 52 mil pesos y otros a los que inmisericordemente les cortaron la luz. Los funcionarios de la CFE impidieron el acceso de los usuarios a las instalaciones públicas y los dejaron afuera a merced de las altas temperaturas. Ya sabemos que el villano de esta película es al hombre que se le caen los sistemas, los electorales, pero también los eléctricos, MANUEL BARTLETT DÍAZ, quien llegó a la dirección general de la CFE con el único atributo de ser un gran amigo del inquilino de Palacio Nacional. BARTLETT DÍAZ no le informa al Presidente, quien no sabe lo que está pasando en Mexicali, grita TAMAI QUINTERO, cuando se entere, lo va a correr. Claro que esto último no va a suceder. Así que solo nos queda como única esperanza que cuando CLAUDIA SHEIMBAUM PARDO llegue a la silla del águila, coloque a alguien con el conocimiento y la sensibilidad necesaria para no realizar cortes de luz en verano y no a alguien por ser su amigazo del alma, como desgraciadamente sucedió en esta administración federal. Es así que es una difícil situación encabezar causas populares en el gobierno, cuando se es gobiernista y parte del gobierno, y sobre todo cuando el que gobierna asegura que el presidente lo sabe todo, bueno, casi todo, menos detalles de la captura de ISMAEL “EL MAYO” ZAMBADA.
REUBICACIÓN NECESARIA
La empresa Zahori debe ser reubicada. Es insostenible mantenerla en la ciudad. La mancha urbana la alcanzó, en la colonia Bordo Wisteria, al Poniente de Mexicali. A final de cuentas es una empresa que maneja materiales peligrosos y suceden accidentes como el de hace unos días cuando se inició un incendio en el área donde se colocan tarimas y aserrín. Fue un tremendo descuido. La empresa debe reubicarse al Oriente de la ciudad, donde está la industria pesada, allá por donde se encuentra la siderúrgica, en la zona de la delegación Cerro Prieto. No se debe cerrar así nomás porque sí, hay que cuidar los cientos de empleos que ahí se generan. Sobre todo cuidar los procesos de producción para que las emisiones de esta empresa sean mínimas, y cause el menor impacto posible al ambiente.
SIN REVANCHISMOS
Así es que Zahori es una empresa mexicalense que se debe proteger, que no solo se trate de revanchismos políticos, pero también hay que exigirle que cuide a los mexicalenses. Y los revanchismos políticos están a la vista cuando un cuestionado personaje que está por adquirir fuero celebró en su muro del Facebook las sanciones aplicadas a esa empresa por el gobierno estatal, a causa del más reciente accidente registrado en sus instalaciones. Con eso está demostrando que aún sigue con la política de su ex jefe JAIME BONILLA VALDEZ, quien como mini gobernador de Baja California llegó a exclamar, en enero del 2020, que los empresarios de esta entidad “chillan más que un puerco atorado en un cerco”.
FISAMEX GANÓN
En aquella época, ese mismo personaje llegó a presumir un reconocimiento, como titular de una de las comisiones estatales de servicios públicos del estado, por ser el organismo a su cargo el que logró la mayor recaudación en base a supuestas auditorías presuntamente realizadas a cientos de empresas por Fisamex. Esta empresa sonorense recibía una comisión del 20 por ciento del monto que las auditadas pagaban a las respectivas comisiones, pero tras una serie de amparos tuvieron que reintegrar esos recursos, sin que se sepa aún que Fisamex también regresó al erario los millones de pesos que cobró por sus supuestas auditorías.
